Creo que me equivoqué
perdí el norte
sin encontrar nuevas direcciones,
a veces
pregunté porqué,
busqué dónde
tal vez
por no saber,
asimilar nuestros errores.
Olvidándote logré
ser menos vulnerable
recuérdame,
aun cuando sea tarde
aun cuando sea tarde
de momento estaré
en otro andén diferente
vuelves o retrocedes,
te fuiste,
despidiéndote un martes
con otro para siempre.
Hoy por hoy busco mi suerte
mañana quién sabe,
el padre que seré
ahora quiero hacer
de pequeños instantes
momentos inolvidables,
gané conociéndote
perdí recordándote,
nada ni nadie
ayuda en balde,
sólo algunos valientes
tendrán presente
sonrisas que ofrecerte,
aunque
aunque
siento contradecirte
pero nunca tuve
una hermosa historia de cine...
Álvaro Camacho