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domingo, 9 de abril de 2017

SOÑAMOS

Jamás logro olvidar,
tú sonrisa ni esa mirada.
Quise caminar,
para encontrar
magia,
pero las dudas
eran su prioridad.
Ahora que te vas
recuerda,
abandonaste para
no regresar más.
Todavía,
miro fotografías
abriendo heridas,
sumando pesadillas
sin ella,
cada noche es fría.
Mi alma
quiere tenerte cerca,
el corazón
detesta despedidas.
Aunque duela,
prefiero soledad
a vivir mentiras.
Quisimos sin amar,
hasta el final
vuela,
descubriendo que las vidas ajenas
aportan fuerzas,
no problemas.


Álvaro Camacho

4 comentarios:

  1. Dejar ir Alvaro, aprender a dejar ir. Es bueno para uno y aunque resulte duro nos deja una puerta abierta a la esperanza. Sin dejar ir siempre estaremos en el mismo lugar. Escribes muy bonito... precioso.

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  2. la paz interior es algo que no puede ser alterado ni por el mas grande amor...muy bueno...

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