Tengo un amor que nada ni nadie, podrá
romperlo jamás
ese sol celestial alumbrando, los
silencios de la oscuridad
sobrino mío ansió abrazarte, para
quererte con toda mi alma
deseo cantarte mil nanas, mientras te
arropo entre sábanas.
Si vida es dura mis manos tendrás,
sujetándote fuerte Lucas
un tesoro sin ser padre, que viste con
flores mis esperanzas
sólo el huele a almíbar, rosas y
lavanda.
Mecerte mientras duermes, un verso sin
final
caminaba queriéndote antes que
llegaras,
nuestra unión será infinita, aportas
luz salvando vidas
porque eres inolvidable, al igual que
tu carita.
A la bisabuela Gracia, tienes ganada
desde que vio esas manitas
mirarte dormir una fortuna, imposible
de pagar
serán pocos todos los besos del
planeta
pero recuérdame como al poeta, que te
ama con locura.
Álvaro Camacho
Facebook: Álvaro Camacho Rodríguez
Instagram: @alvaroverso
Tu pequeño capitan, que bello poema. Cuando crezca y lo lea... le encantara. Es precioso.
ResponderEliminarEso espero y deseo con el corazón Laura. Muchísimas gracias un beso enorme!!!
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